Emplazamientos casi imposibles

1. Historia Documentado en el 976 y con arreglos durante los años 980 al 987. El conde Borrell II lo vende al vizconde Guitard de Barcelona. El linaje de Queralt lo poseyó por el año 1075. Fue motivo de disputa por el año 1002 entre el obispo de Urgell y Bernat Sendred de Gurb. Años más tarde la saga de los Gurb adoptará el nombre de Timor. El cambio comenzó con Guillerm de Gurb, señor del castillo de Gurb que en el año 1213 renombró a este castillo con el nombre de Castillo de Queralt. Los Timor reciben el título de Condes de Santa Coloma en el año 1599. Las sucesivas guerras que se libraban en estos territorios terminaron por despoblar la zona y en concecuecia el abandono del castillo fue inminente. Más tarde lo comprará un tal Josep Safonst. Actualmente se pueden visitar los restos de sus muros, sobre la zona Oeste queda una gran muralla que se levanta desde la misma montaña, un arco que revela un portal de entrada ya casi cubierto por la maleza y la erosión del terreno, al Este quedan los restos de la torre y en la parte Sur hacia abajo del cerro los restos de la primitiva iglesia del castillo, en pie quedan los resto del ábside y del campanario con una ventana gótica, sobre los restos de la muralla se pueden ver los ventaniles de vigilancia y defensa que aún denotan la sencilla belleza de su estructura medieval, unas piedras más conforman lo que resta de este castillo. Abajo en la del cerro está la iglesia de San Cristòfol en actual restauración. La subida al cerro no tiene mayor complicación pero hay que vigilar. Las panorámicas son impresionantes como puede ver en las fotos.